Tus zapatillas de correr son el artículo más importante para ti. Buscas el mejor modelo e intentas cambiarlas de manera habitual. Para aumentar la vida útil de tus zapatillas de correr (¡y que no las cambies tan a menudo!) te daré 4 consejos.
4 consejos para aumentar la vida útil de tus zapatillas de correr
Las zapatillas, especialmente las de entrenamiento, tienen una vida demasiado corta. En mi caso cada temporada tengo que renovarlas, y eso que no paso de los 50 kilómetros a la semana.
Esto supone que cada año toca rascarse el bolsillo y elegir las zapatillas más adecuadas para correr.
Para evitar que la vida de la zapatilla sea aún más corta he aprendido diferentes trucos que alargan la duración de esta.
1. Los cordones cumplen una función: nunca te quites tus zapatillas de running sin haber desatado antes los cordones y, por favor, no intentes meter el pie en ella si has sido incapaz de sacar el nudo antes. Tanto al ponértelas como sacártelas con los cordones atados consigues que tus zapatillas de entrenamiento o competición se deformen y acortes su vida útil.
2. A tus zapatillas ni agua: no tengas ninguna duda de que el charco donde acabas de meter el pie perjudica al material del que está hecho las zapatillas de running. Salvo que compitas en cross, evita de cualquier manera mojar tu calzado, y si lo haces no olvides secarlas bien al llegar a casa. De no hacerlo se pueden pudrir las zapatillas.
3. Para lavarlas mejor a mano: ni pienses en meter las zapatillas de entrenamiento o competición en la lavadora por muy sucias que estén. Lo ideal es lavarlas a mano. Con el calor de la lavadora solo conseguirás que los materiales se dañen y es posible que el pegamento de los mismos se separe.
4. Lo mejor está lejos del sol: suele pasar que después de un entreno bajo la lluvia o una limpieza a fondo de las zapatillas de entrenar las pongas debajo del sol para que se sequen más rápido. Las intenciones son buenas, sino fuera porque el sol acaba secando y endureciendo la zapatilla, provocando que la parte superior de esta se vuelva más dura. La mejor manera de secar unas zapatillas de correr es utilizando papel de cocina. Solo con ponerle en el interior ya absorberá toda la humedad de la zapatilla.