El entrenamiento de fuerza lo puedes hacer de muchas maneras, con tu propio peso o ayudándote de pesas. Existen diferencias de entrenar con pesas o con tu propio peso que debes conocer.
Dependiendo de tu forma física y en el momento que te encuentres de la temporada podrás entrenar de una u otra manera.
El dilema sobre si es mejor entrenar con peso o con tu peso corporal es amplio y hay muchas posiciones encontradas, pero es importante recordar que no en todos los deportes es necesario el mismo trabajo de fuerza.
¿Qué beneficios tiene el entrenamiento con pesas?

Aunque en ambos casos se busca trabajar la musculatura y ganar fuerza, no es lo mismo levantar pesas o entrenar en una máquina que utilizar tu propio peso para ponerte en forma.
El entrenamiento con pesas está principalmente orientado a trabajar de manera específica una zona muscular con el objetivo de ganar fuerza y que el músculo crezca de tamaño.
Los beneficios del entrenamiento con pesas son los siguientes:
Mayor crecimiento muscular: con el entrenamiento con pesas puedes progresar y mejorar tu fuerza añadiendo más peso al ejercicio, por lo que el crecimiento muscular es mayor. A más peso añadas, la intensidad del ejercicio aumenta, por lo que desarrollarás músculos más grandes.
Trabajo especifico: con las pesas puedes trabajar de una manera tan específica que podrás elegir un solo músculo y fortalecerlo. Esto te permitirá concentrar el esfuerzo en un músculo y así aumentar su fuerza.
Gran variedad de ejercicios con ejecución sencilla: hay ejercicios de pesas que por su complejidad no se recomienda a principiantes, pero el abanico es tan amplio que encontrarás muchos ejercicios, como el press banca, que podrás hacer con las pesas sin necesidad de tener experiencia.
Quema de grasas: aunque se piensa que levantar pesas es una manera poco útil de quemar grasa y perder peso, lo cierto es que puedes llegar a quemar hasta 200 calorías por media hora de entrenamiento.
Los inconvenientes del levantamiento de pesas es que es necesario tener una base previa para poder entrenar de esta manera. Además, el riesgo de lesión es más alto, sobretodo por utilizar un exceso de peso, lo que daña músculos y articulaciones.
Respecto a la relación con el running, las pesas son una pieza clave al comienzo de la temporada, pero no es conveniente abusar de ellas, ya que el tipo de trabajo necesario para correr se basa en ejercicios de fuerza que luego se puedan trasladar al gesto en carrera y no a una simple repetición de un ejercicio en concreto.
¿Qué beneficios tiene el entrenamiento con tu propio peso?







El entrenamiento de fuerza con tu propio peso también te ayudará a perder peso, pero además tiene los siguientes beneficios:
Es ideal para principiantes: si todo eso de levantar pesas en el gimnasio te parece que no va contigo porque eres nuevo en esto, lo mejor es que empieces haciendo ejercicios de fuerza con tu propio peso. De esta manera evitarás lesiones por exceso de peso o mala ejecución y ganarás resistencia y fuerza para más adelante poder utilizar pesas.
Te ayudan a recuperarte de las lesiones: ejercicios como los isométricos forman parte de toda tabla de entrenamiento para volver a correr tras una lesión. Esto es así porque ayudan a fortalecer los músculos sin necesidad de utilizar pesos elevados ni forzar las articulaciones.
Mayor movilidad articular y flexibilidad: los ejercicios con tu propio peso permiten adoptar posturas donde trabajas la amplitud de movimiento de tus articulaciones y también la flexibilidad, ya que el músculo no se hipertrofia como pasa con el levantamiento de pesas.
Entrenar la fuerza con tu propio peso también tiene inconvenientes y riesgos, como la necesidad de mantener una buena postura en la ejecución, para no adquirir posturas que puedan provocar lesiones.
También llega un punto que si lo que buscas es ganar masa muscular, los ejercicios de fuerza con tu peso se vuelven insuficientes y necesitas utilizar peso extra.