Lo visto en el Mundial de Atletismo de Eugene 2022 ha sido poco menos de lo esperado por Jakob Ingebrigsten, que vio como se le escapaba el oro de los 1.500 metros, pero sentenció en la prueba de 5.000 metros y se impuso a atletas de talla de Joshua Cheptegei.
Quería demostrar que soy mejor corredor que todos los demás
Esta frase, utilizada por Jakob Ingebrigsten en la entrevista posterior a la carrera seguro que levanta polémicas, como ya lo hizo el no aceptar su segundo puesto en 1.500 metros al decir que Jake Wightman «era un atleta inferior» a él.
Con arrogancia o no, lo que es cierto es que Jakob Ingebrigsten ha demostrado que si bien puede no ser el mejor, está muy cerca de lograrlo.
En la final de 5.000 metros de los Mundiales de Atletismo de Eugene se vio a Jakob Ingebristen corriendo atrás en todo momento, dejando que fueran los africanos los que marcaran el ritmo. Decidido, pero sin prisas por aparecer en la escena.
Tanto control proyectaba, que se permitió ir a la calle exterior hasta en 2 ocasiones para beber del avituallamiento.
Tras unos kilómetros de más a menos, pasando el primer 1000 a 2:36 y el tercero a 2:47, Ingebrigsten se empieza a colocar en cabeza, relajado, pero preparando el ataque final.
A partir del kilómetro 4 el noruego se desata y rompe el grupo de cabeza, corriendo este último kilómetro a 2:23 y con una última vuelta en 53.93. Pocos son los que ya le siguen, el keniano Krop, el ugandés Chelimo y 2 o 3 atletas mas van a la zaga.
Finalmente cruza la meta en 13:09.24, seguido de Krop (13:09.98) y Chelimo (13:10.20). Luis Grijalva, atleta guatemalteco, llega en cuarta posición, con un tiempo de 13:10.44.
Fotografía: EFE