Los guantes de running son, tal como su nombre lo indica, guantes cuya función es proteger las manos y gran parte de la muñeca al momento de correr. Puede servir para el frío, como así también para precaución; por ejemplo, en casos de caídas en terrenos de piedra, montaña u otros cuyas probabilidades de lastimarte son altas.
Lo cierto es que la utilización de este elemento o prenda radica también en otra cuestión: la costumbre. Es decir, quienes lo emplean a menudo evidencian gran comodidad, protección y hasta incentivo para comenzar y continuar con la actividad.
Beneficios de los guantes de running
A partir de lo descrito en los primeros párrafos es un hecho que los guantes de running son muy útiles. Esto se debe a que benefician a los corredores en diferentes sentidos. ¿Cuáles o en qué? En todo lo siguiente:
- Vas a poder correr con bajas temperaturas sin que el frío implique un inconveniente para tus manos, dedos y muñecas
- Al evitar que las manos se enfríen las puedes mover mejor durante el recorrido y, así, complementar el accionar de las piernas
- Protegen del viento, el cual es molesto si hace tanto frío como calor, y de la lluvia
- El hecho de tener las manos protegidas puede favorecer el desenvolvimiento general. Es lo que les sucede a muchas personas
- Al abrigar las manos puedes quitarte algún buzo o campera
Recuerda que, debido a su escaso porcentaje de grasas y de masa muscular, las manos se encuentran entre las zonas más sensibles al frío. Y, aunque te afecta solamente allí, se trasladará casi por defecto a otras partes y perjudicará tu rendimiento.
¿Qué tener en cuenta al momento de comprar guantes para correr?
Al ser tan útiles, la demanda de guantes para running es muy alta, como así también la oferta. Si buscas en Internet o recorres los diferentes negocios físicos encontrarás decenas de opciones que varían según su diseño, tamaño, composición, tela, color o tonalidad, dibujos, etc.

















Para adquirir los guantes correctos y más efectivos debes considerar los siguientes aspectos:
- Tejido: deben ser lo más gruesos posible por dos razones. Por un lado, son los que más abrigan durante el invierno. Por otro, suelen durar más tiempo dado que resisten mejor a los lavados y estiramientos
- Comodidad: esto es pura y exclusivamente personal. Es decir, cualquiera sea el aspecto del que te hablemos o recomendemos, colocártelos y que los sientas bien, mal, ajustados, holgados y cómodos depende de ti
- Color y que sea reflectante: por un lado, se recomienda que el color o tonalidad combine con el resto de las prendas. Por otra parte, si corres de noche, lo mejor es que sean reflectantes para mayor seguridad
Los tipos de guantes más frecuentados para correr
Está claro que correr no es igual que caminar e incluso realizar otras actividades. Por ello los guantes que adquieras pueden ser diferentes. Lo cierto es que los más frecuentados son los tres siguientes:
- Térmicos: su tela es denominada a prueba de viento y tiene como objetivo, justamente, aislar completamente a las manos del viento y, por ende, de la temperatura fresca que este provee con sus respectivas consecuencias
- A prueba de salpicaduras: aísla a las manos del agua y la humedad, la cual puede provenir tanto de la lluvia como del clima e incluso al ensuciarse con tierra
- Especialmente finos: están fabricados con tela suave para resultar más ligeros y suaves. De hecho, sirven para poder manipular un dispositivo táctil
























Los guantes para correr son más que recomendables, porque te aportarán comodidad, confort y hasta mayor seguridad. ¡Compra unos, úsalos y así lo comprobarás!