Los entrenamientos físicos exigen energía, fuerza y resistencia al cuerpo, por lo que al terminar la actividad, el cuerpo puede presentar diversos dolores, molestias o sobrecargas que necesitarán una correcta atención para mejorar el bienestar físico y la recuperación del mismo. Existen numerosas formas para cuidar del cuerpo al finalizar un intenso entrenamiento físico y así garantizar una mejor salud.
Geles para el cuerpo
Los geles son una de las soluciones más efectivas para mejorar el cuidado del cuerpo después de entrenamientos físicos exigentes. Estos geles se pueden encontrar en internet, más concretamente en esta farmacia, con la seguridad de que son productos de marcas reconocidas en el sector de la salud, por lo que su calidad y eficiencia a la hora de cuidar de los músculos y articulaciones del cuerpo, estarán garantizadas.
Los geles ayudarán en la relajación de los músculos y articulaciones después de entrenar, esto reducirá el tiempo de recuperación del cuerpo. Además, pueden aliviar los dolores provocados por golpes, contusiones, sobrecargas o contracturas, provocadas por el entrenamiento físico.
Al tratarse de un producto de uso tópico, el efecto relajante sobre la zona afectada funcionará de inmediato. Además, su aplicación es sencilla, con ligeros masajes en la zona del cuerpo con dolor, así se aprovecharán todos sus beneficios, siendo posible aplicarlo las veces que se necesite hasta aliviar completamente el dolor.
La mayoría de estos productos se fabrican con ingredientes naturales, como caléndula, hipérico y árnica, ingredientes que destacan por sus propiedades relajantes y antiinflamatorias. Al ser ingredientes naturales, su efecto sobre el cuerpo no provocará reacciones alérgicas sobre la piel.
Incluso estos geles se pueden utilizar antes de realizar las actividades físicas, ya que preparará a los músculos y a las articulaciones ante las exigencias de cada entrenamiento, y así se podrán prevenir las lesiones o dolores provocados por la actividad.
Estirar al terminar
Al terminar el entrenamiento, se recomienda descansar un poco para realizar diversos estiramientos, tanto en piernas, hombros, brazos y espalda, aprovechando que el cuerpo está activo.
A través de los estiramientos se prevendrán los posibles dolores al terminar la actividad física, también ayudará a que los músculos se mantengan más flexibles y se reducirán las posibilidades de sufrir algún tipo de lesión una vez terminado el entrenamiento, así como antes de realizarlo la próxima vez.
De igual manera, los estiramientos reducen la acumulación de ácido láctico, el cual puede generar calambres y rigidez en los músculos. Los estiramientos deben realizarse en tramos y no de forma tan seguida, de lo contrario, no se aprovecharán de la manera correcta.
Al momento de realizar los ejercicios de estiramientos, los mismos se realizarán durante un tiempo de entre 10 a 30 segundos. Es importante realizar los estiramientos de la manera correcta, para que los músculos contraídos después del entrenamiento se puedan relajar y así acelerar la recuperación del cuerpo.
Tomar agua después de entrenar
Hidratarse durante el entrenamiento es de vital importancia, pero lo es igual después de terminarlo, ya que al realizar una actividad física exigente se pierden fluidos esenciales para el organismo, los cuales se utilizan para dicha actividad.
Después de finalizar el entrenamiento, rehidratarse ayudará a que el cuerpo recupere la mayoría de los fluidos esenciales. La cantidad de agua a tomar dependerá de la exigencia del ejercicio y la cantidad de sudor eliminado, sin importar el tiempo dedicado al entrenamiento, ya sean 30 minutos o 1 hora.
Para calcular la cantidad de agua que se debería tomar tras acabar una actividad física, un método sencillo es pesarse anteriormente a realizar una rutina de ejercicios y también después, con los datos recogidos, cabe saber que con cada 400 gr perdidos, será necesario beber 450 cc de agua.
Además, el agua se debe beber de forma lenta y calmada, para garantizar la mayor absorción por parte del organismo. No se deben tomar bebidas gaseosas o alcohol, si se pretende conseguir una mejor recuperación y cuidar la salud del cuerpo después del entrenamiento.
Gracias a los geles, una buena rehidratación y los estiramientos, se garantizará un mejor cuidado para el cuerpo después de las actividades físicas a las que el mismo es sometido durante un entrenamiento, mejorando la recuperación total de los músculos y las articulaciones, para que así estén en buenas condiciones para la próxima vez que se realice el entrenamiento.