Todos los médicos y especialistas recomiendan a sus pacientes beber entre 1.5 y 2 litros de agua diarios para el correcto desarrollo de las funciones de su organismo. Así, correr implica un desgaste mayor debido a la exigencia y esfuerzo que realizas. Te mostramos cuántos litros de agua para correr necesitas.
Concretamente, si 1.5 o 2 litros por día es la cantidad que se indica para contextos de mayor tranquilidad (por ejemplo, caminar unas cuadras), es claro que para el running aumenta. Sin embargo, no se trata sólo de la cantidad, sino también de la calidad y del modo.
¿Cómo debo distribuir los litros de agua al correr o durante el ejercicio físico?
Este interrogante explica (o al menos amplía) lo último descrito. Si un día vas a correr en algún momento, entonces tu organismo deberá compensar su mayor intensidad de trabajo recibiendo más líquido que el habitual. No obstante, no lo satisfarás sólo proporcionándole más agua, sino también ingiriéndola de manera adecuada.
Esto último significa beber menos o más según lo que resulte necesario; no será igual lo que tu cuerpo demandará, por ejemplo, entre las 14 y 17 horas que entre las 18 y 20 cuando estés corriendo.
Para que lo comprendas mejor, te mostramos cómo debes distribuir el líquido durante una jornada de running o actividad física:
- 500ml desde que te levantas hasta luego del almuerzo
- 400ml durante la tarde
- 800ml entre que comienzas tu jornada de running y otras actividades físicas (incluyendo deportes)
- 400/500ml luego de esta última y hasta media hora antes de irte a dormir
No se recomienda beber mucho líquido en el momento previo a acostarte por dos razones: por un lado, es un periodo en el que el desgaste es mínimo. Por otro, lo más probable es que te despiertes durante la noche para ir al baño, lo cual puede resultarte molesto.
¿Líquido significa sólo agua mineral?
No necesariamente. Y este es un punto muy interesante a abordar ya que debes conocer de qué se trata y todo lo que abarca. Primero que nada, el agua puede ser mineral, mineralizada o de filtro.
Sin embargo, existen también algunas de las siguientes variantes:
- Aguas saborizadas: hay quienes las llaman jugos, aunque en realidad no lo son. Se trata del agua mineral tal como la conoces, pero con el agregado de frutas (naranja, manzana, pera, kiwi, mountain blast, frutos rojos, ananá, etc.) que proveen un gusto distinto y que, para muchos, resulta más agradable
- Bebidas energizantes: refiere a bebidas particulares como Powerade y Gatorade, respectivamente. Ambas se ofrecen en diferentes sabores (al igual que las aguas saborizadas), pero proporcionan mayores propiedades y energías al organismo
¿Cuál es la diferencia entre las aguas saborizadas y bebidas energizantes?
Un nutricionista o ingeniero en alimentos podría escribir decenas de hojas describiendo las características y diferencias de cada una. En este caso, te vamos a mostrar las dos más relevantes y que, al fin y al cabo, más influyen en la práctica.
- Las aguas saborizadas son muy parecidas al agua mineral, pero con un agregado de sabor especial y una mayor cantidad de carbohidratos y otras propiedades
- Las bebidas energizantes contienen propiedades extras que refuerzan la vitalidad que el organismo requiere para la alta exigencia. Por ello, se emplean en competencias como maratones y otras de gran complejidad
No obstante, el agua es la única que se recomienda superar los 1.5 litros diarios. ¿Por qué? Porque las saborizadas y energizantes se recomiendan sólo para momentos especiales; por ejemplo, tras finalizar una carrera.
Está comprobado por decenas de estudios que el agua mineral es la bebida más sana y amigable con el organismo. La respuesta al interrogante sobre cuántos litros de agua para correr necesitas es la siguiente: entre 1.5 y 2 litros diarios, aunque depende de la bebida.