El running es una actividad física popular y beneficiosa que puede mejorar la salud cardiovascular, la resistencia y el bienestar general. Ya sea que estés considerando empezar a correr por primera vez o estés retomando esta práctica después de un descanso prolongado, es esencial entender las diferencias para asegurar un progreso efectivo y evitar lesiones.
Asimismo, no es igual para tu organismo y músculos adaptarse a algo completamente nuevo que retomarlo y, por ende, tener que volver a acostumbrarse. En este artículo, exploraremos las distintas perspectivas de empezar a correr y retomar. También todo lo que debes considerar tanto al comienzo como durante el transcurso de las semanas y meses.
Empezar a correr: los cimientos de una nueva aventura
Sí, correr por primera vez implica una buena decisión por todos los beneficios ya descritos en diversas facetas; desde el fortalecimiento de los músculos hasta lo mental. Sin embargo, hay quienes se refieren a cimientos de una nueva aventura por todo lo siguiente:
Preparación física y mental
El primer paso es ser realista sobre tu nivel de condición física actual y establecer metas alcanzables. Comenzar con sesiones cortas y lentas puede ayudarte a construir una base sólida para futuros desafíos.
Además, debes estar preparado mentalmente para enfrentar el proceso gradual de mejora, sin desanimarte por los resultados inmediatos. Todo esto ya permite entender cómo la psicología desempeña un rol clave en la actividad.
Forma y técnica
Aprender la técnica de carrera adecuada desde el principio es esencial para prevenir lesiones y maximizar el rendimiento. Los principiantes tienen la ventaja de comenzar con una pizarra en blanco, lo que les permite adoptar una técnica que les resulte correcta.
Progresión gradual
El aumento de la distancia y la intensidad debe ser progresivo para evitar el exceso de esfuerzo y prevenir lesiones. Asimismo, los principiantes tienen que ser pacientes y permitir que sus cuerpos se adapten gradualmente al estrés del ejercicio, siguiendo un plan de entrenamiento que así lo establezca.
Retomar la carrera: un nuevo comienzo con experiencias previas
Tal lo que el término indica, no vas a correr por primera vez, sino que ya lo hiciste alguna vez y, por lo tanto, el desafío radica en adaptarse ya sea para igualar o superar tus marcas.
Evalúa tu punto de partida
Antes de retomar la carrera, es esencial evaluar tu nivel de condición física actual y tener en cuenta cualquier cambio en tu salud o forma física. No asumas que puedes retomar donde lo dejaste, ya que es posible que necesites empezar con menos intensidad y distancia.
Aprender de experiencias pasadas
Si has tenido experiencias previas corriendo, es momento de reflexionar sobre lo que funcionó bien y lo que no. Aprovecha las lecciones aprendidas para repetir errores y, a su vez, aumentar la eficiencia.
Diferencias clave entre correr por primera vez vs retomar
Una vez más, queda muy claro que empezar a correr es muy diferente respecto a hacerlo nuevamente, aun incluso si transcurrieron unos años. Esto se debe a múltiples razones, pero las tres principales, las siguientes:
- Adaptación física y mental: empezar ofrece la ventaja de una adaptación física y mental más sencilla desde cero, mientras que retomar requiere de superar el desafío de recuperar la condición física previa
- Reaprender la técnica: quienes retoman la carrera pueden necesitar trabajar en la readopción de una buena técnica de carrera, mientras que los principiantes pueden aprenderla más fácilmente desde el inicio.
- Reto psicológico: para algunos, retomar la carrera resulta más exigente psicológicamente, ya que pueden comparar su rendimiento actual con su estado anterior. En cambio, los principiantes tienden a enfocarse en mejorar y alcanzar nuevos logros
Empezar a correr y retomar la carrera presentan sus propios desafíos y ventajas. No olvides de seguir todo lo que te hemos facilitamos y evidenciarás resultados muy positivos.