Utilizar la atención selectiva en el running es un componente clave para el rendimiento y la seguridad durante la práctica de este deporte. La capacidad de enfocar nuestra atención en aspectos específicos de nuestra carrera puede marcar la diferencia entre alcanzar nuestros objetivos y enfrentar obstáculos innecesarios. En este articulo, después de ponernos en contacto con los expertos de Mentee exploraremos qué es la atención selectiva en el running y cómo puede mejorar nuestra experiencia como corredores.
La atención selectiva se refiere a la habilidad de dirigir conscientemente nuestra atención hacia un estímulo o tarea específica, mientras filtramos o ignoramos otros estímulos irrelevantes. En el contexto del running, esto implica ser capaces de concentrarnos en aspectos cruciales de nuestra carrera, como la técnica de carrera, el ritmo, la respiración y la postura, mientras minimizamos las distracciones y los pensamientos intrusivos.
Uno de los elementos fundamentales para utilizar la atención selectiva en el running es la conciencia corporal. Esto implica estar conscientes de las sensaciones físicas de nuestro cuerpo mientras corremos, como la posición de nuestros pies, la alineación de nuestra columna, la tensión en nuestros músculos y la respiración. Al dirigir nuestra atención hacia estas sensaciones, podemos identificar y corregir posibles desequilibrios o tensiones que podrían interferir con nuestra eficiencia y rendimiento.
Otro aspecto crucial de la atención selectiva en el running es la focalización en el presente. A menudo, nuestra mente tiende a divagar, saltando entre pensamientos pasados o preocupaciones futuras. Sin embargo, al correr, es esencial estar presentes en el momento actual. Esto implica enfocar nuestra atención en la respiración, en el ritmo de nuestros pasos y en las sensaciones del entorno que nos rodea. Al hacerlo, podemos disfrutar plenamente de la experiencia de correr y maximizar nuestro rendimiento.
La atención selectiva también puede aplicarse a la técnica de carrera. Al dirigir nuestra atención a aspectos específicos de nuestra postura, zancada, braceo y cadencia, podemos mejorar nuestra eficiencia y reducir el riesgo de lesiones. Por ejemplo, podemos enfocarnos en mantener una postura erguida, con los hombros relajados y los brazos oscilando de manera coordinada. También podemos prestar atención a la forma en que aterrizamos y despegamos cada pie del suelo, evitando impactos excesivos o movimientos bruscos.
En una carrera de larga distancia, la atención selectiva también puede ser útil para manejar la fatiga mental y física. En momentos de agotamiento, podemos dirigir nuestra atención a objetivos a corto plazo, como alcanzar la siguiente señalización o mantener un ritmo constante hasta un punto de referencia determinado. Al hacerlo, evitamos que nuestra mente se concentre en la fatiga y nos motivamos a seguir adelante.
Además de mejorar el rendimiento, la atención selectiva en el running también juega un papel importante en la seguridad. Al estar atentos al entorno, podemos evitar obstáculos en el camino, como piedras, raíces o desniveles. También podemos ser conscientes de otros corredores, ciclistas o vehículos que puedan cruzar nuestro camino, evitando situaciones potencialmente peligrosas.
¿Cómo mejorar la atención selectiva si corres?
La atención selectiva en el running se puede desarrollar y fortalecer a través dela práctica y la experiencia. Al principio, puede resultar desafiante mantener el enfoque en aspectos específicos mientras corremos, especialmente si estamos acostumbrados a dejar que nuestra mente divague libremente. Sin embargo, con la práctica constante, podemos entrenar nuestra atención para que sea más selectiva y enfocada.
Existen varias estrategias que pueden ayudarnos a mejorar nuestra atención selectiva en el running. Una de ellas es establecer metas claras antes de cada carrera, enfocándonos en los aspectos que deseamos mejorar o mantener durante nuestra carrera. También podemos utilizar técnicas de visualización, imaginándonos corriendo con una técnica fluida y eficiente, lo cual nos ayudará a mantener el enfoque en la ejecución correcta.
En conclusión, la atención selectiva en el running es esencial para mejorar el rendimiento y la seguridad durante la práctica de este deporte. Al dirigir conscientemente nuestra atención hacia aspectos específicos de nuestra carrera, como la técnica de carrera, el ritmo y la postura, podemos optimizar nuestra eficiencia y minimizar el riesgo de lesiones. Además, la atención selectiva nos permite disfrutar plenamente de la experiencia de correr, estando presentes en el momento actual y cultivando una mayor conciencia corporal. Con práctica y enfoque, podemos desarrollar y fortalecer nuestra atención selectiva, potenciando así nuestro desempeño como corredores.