¿Por qué aparecen las ampollas en los corredores?

Tabla de contenidos

Pocos son los corredores que pueden afirmar que durante su carrera deportiva no han sufrido las insoportables ampollas. Los pies, las axilas y los talones son las zonas favoritas donde aparecen las ampollas en los corredores. Esta circunstancia a pesar de no ser grave es increíblemente dolorosa, molesta y puede hacer perderte días de entrenamiento.

Hay diferentes factores que aumentan el riesgo de sufrir ampollas y combatir dichos factores dará como resultado evitarte las molestias.

¿Por qué aparecen las ampollas en los corredores?

Las ampollas en los corredores no aparecen de un día a otro sino que a lo largo del tiempo los hábitos incorrectos hacen que aparezcan las ampollas en diferentes lugares. Estos hábitos son:

1.Correr con una camiseta técnica de baja calidad

Yo soy de los que piensa que pagar 50€ por una camiseta técnica de la marca Nike o Adidas puede ser algo caro, pero de sobras lo compensan con la calidad de los materiales y las sensaciones que deja el vestirte con una camiseta técnica de calidad.

Aunque a primera vista puede parecer un gasto excesivo, comprar una camiseta técnica de calidad es fundamental para evitar sufrir ampollas. El tejido de calidad favorece la transpiración y también evita roces al ser menos rugoso.

Te será de utilidad...  Muerte súbita en el deporte

2.No utilizar vaselina

Si has corrido un maratón ya sabes de lo que hablo. Las ampollas en los corredores aparece por el excesivo rozamiento de ciertas partes del cuerpo contra el tejido. Si corres un maratón o una carrera de ultradistancia no te salvará de las rozaduras ni el mejor equipamiento técnico, por ello la vaselina es otra arma para combatir las ampollas en los corredores.

En los entrenamientos largos y en verano siempre es aconsejable utilizar vaselina en axilas, inglés y pezones para que no se resientan al final del día.

[Tweet «¡Las ampollas en los corredores son evitables cambiando de hábitos!»]

3.Utilizar zapatillas pequeñas y calcetines inadecuados

Seguro que ya estás harto de oír que a la hora de comprar las zapatillas para correr lo aconsejable es que sean un poco más grandes, si es posible una talla más de las que utilizas para ir por la calle. Cuando lo oyes tanto es que hay un motivo de peso: las zapatillas pequeñas provocan ampollas en los corredores.

Te será de utilidad...  ¿Cómo evitar un golpe de calor cuándo corres en verano?

Además estas también aparecen cuando se utilizan calcetines de baja calidad o aquellos que no están hechos para correr. Nunca está de más que ya que pagas 150€ por unas zapatillas lo complementes con unos calcetines deportivos, que como mucho te costarán 10 euros más y tus pies lo agradecerán.

4.Estrenar equipamiento en una competición

Ya se que tienes ganas de probar tus nuevas zapatillas voladoras con las que te han asegurado que serás más veloz pero el día de la competición no es el mejor momento para estrenar nada. No sabes como tu puede influir calzar un tipo de zapatilla o probar una camiseta que nunca has utilizado.

Las ampollas en los corredores aparecen en numerosas ocasiones por probar un equipamiento nuevo en una competición. Si algo te funciona no lo cambies el día que compitas y todas las novedades pruebalas primero en los entrenamientos para ver si te causan algún tipo de molestia.

Tratamiento de las ampollas en corredores

Si no has podido evitar la aparición de ampollas durante la práctica deportiva y eres victima de su molestia, existen diversas maneras de tratar esta afección, dependiendo siempre de la gravedad de esta.

Te será de utilidad...  Si te crujen las rodillas al correr estas son las razones

Una cosa que nunca debes hacer y está totalmente desaconsejado es arrancarte la ampolla. Hacerlo es un error, y es que la ampolla protege a la herida que tienes en la zona de infección y rozaduras, por lo que arrancar esa protección solo empeora las cosas.

Existen 2 tratamientos principales para las ampollas en corredores. El primero es simplemente descansar, mantener hidratada la ampolla y esperar a que el cuerpo reabsorba el líquido que hay dentro de esta, durante este tiempo la ampolla sirve de protección de a herida.

El segundo tratamiento lo puedes hacer siempre y cuando tengas cuidado. Se trata de pinchar suavemente la ampolla con una aguja estéril y hacer que el liquido salga hacia afuera. Después de esto es importante tapar la zona y lavarla de manera frecuente para evitar infecciones.

Estos tratamientos son indicados para ampollas de carácter leve, si la que sufres reviste de gravedad ya estás tardando en visitar a un médico especialista.