Un buen entrenamiento personal es aquel que consigue desarrollar todo el potencial de un atleta, teniendo en cuenta sus características propias y por tanto adaptando el nivel de esfuerzo a la capacidad de este.
El profesional lo puedes encontrar en cualquier ciudad, puedes encontrar un entrenador personal en Barcelona como lo puedes encontrar también en la ciudad más pequeña. Incluso existen entrenadores personales que trabajan a través de Internet.
Independientemente de su metodología de trabajo, los resultados siempre tienen que ir enfocados a la mejora del atleta y al cuidado de su salud.
¿Cuáles son las bases de un buen entrenamiento personal?
Entrenamiento adaptado y personal
Aunque suena obvio repetirlo, el entrenamiento personal es justamente eso: personal.
Es una de las principales bases que utilizan los entrenadores personales en Barcelona y en el resto de la geografía mundial. Cada entrenamiento es único para cada atleta y tiene en cuenta sus necesidades deportivas, así como sus limitaciones y su estado de salud.
Ningún entrenador personal de calidad te creará una tabla de ejercicios sin antes saber tus antecedentes deportivos.
Mejorar pero sin lesionar
Este debería ser uno de los pilares principales del entrenamiento personal. Un buen entrenador personal sabe encontrar el equilibrio entre el esfuerzo y el exceso de ejercicio.
La clave es nunca poner en riesgo de lesión a la persona que es entrenada y para esto la carga de intensidad debe ser progresiva y adecuándola a la evolución como deportista.
No por entrenar más fuerte se van a conseguir mejor resultados. En el peor de los casos este sobreesfuerzo acaba derivando en lesiones de diversa gravedad.
Conocer los limites del deportista
A mi me gustaría correr un 800 por debajo de los 2 minutos pero, al menos a día de hoy, es imposible.
Mi entrenador me conoce y también sabe esto, por esta razón entreno según mi condición. Se que nunca me haría entrenar a ritmos demasiado rápidos para mi, así como tampoco me castigaría con rodajes excesivamente lentos.
Este pilar, tan fundamental como básico, refuerza la confianza entre entrenador personal y deportista, una faceta indispensable para mejorar como deportista.
Las limitaciones de cada persona marcarán el nivel, la cantidad y la calidad del entrenamiento, por esta razón un buen entrenador personal debe saber donde están los límites de su atleta.
¿Qué puedes conseguir si te pones en manos de un entrenador personal?
Dependiendo de tus objetivos el entrenador personal definirá una pauta de ejercicios y entrenamientos para que llegues a él. Entre los más destacados están:
- Pérdida de peso: perder peso es una de las razones principales por las que muchas personas se ponen en manos de un especialista. Si este es tu objetivo, y estás en buenas manos, conseguirás de manera progresiva una reducción de peso. El objetivo de los programas de entrenamiento será quemar más calorías de las que ingieres en tu día a día y para ello el trabajo aeróbico resulta fundamental.
- Preparación de oposiciones: en este caso los objetivos tienen una fecha concreta y el trabajo del entrenador personal se basará en afinar al máximo tu rendimiento para que llegues a la fecha señalada en tu mejor forma. El entrenamiento es mucho más específico que el anterior ya que normalmente se dispone de un horizonte temporal menor.
- Competir al máximo nivel: si quieres conseguir tu mejor marca en una distancia determinada o eres una persona dispuesta a dejarse la piel para competir al mejor nivel, un buen entrenador personal es la mejor herramienta para conseguirlo. Para ello, tu entrenador ideará un plan de entrenamiento que se adaptará a tus objetivos a corto, medio y largo plazo, dando la posibilidad de modificarlo si surgen situaciones imprevistas y respetando siempre el descanso estipulado. En este caso el resultado no será visible en un par de meses pero tras un par de temporadas en sus manos notarás una gran mejoría.
- Mantener buena condición física: otro de los objetivos que se marcan las personas que se ponen en manos de un entrenador personal es la de mantener la forma física. En este caso una serie de ejercicios de condición física junto con entrenamiento de fuerza y aeróbico permiten a estas personas mantener una vida saludable, alejar las enfermedades y obtener una buena calidad de vida.