Si el running posee tantos beneficios para el organismo, la mente, el sistema cardiovascular y es tan recomendado por especialistas, ¿Por qué correr da miedo? Se trata de un interrogante que genera decenas de debates.
A continuación, te mostramos por qué sucede esto, a qué se debe, cómo combatirlo y, fundamentalmente, cómo animarte a iniciarte en el mundo del running.
Razones por las que correr da miedo
Para conocerlas es necesario comprender primero el contexto al que la persona queda sometida. Olvídate por unos segundos del running en sí. Imagina que te están recomendando una nueva actividad, que requiere de su tiempo y que desconoces. Bueno, esa desconfianza es la que deviene en miedos, dudas y sensaciones negativas.
Así, te mostramos las cinco razones principales por las que las personas tienen miedo a correr las primeras veces:
Sufrir la inseguridad o un suceso grave
Salir a correr implica permanecer en la vía pública, ya sea al dar vueltas en el parque o incluso al tener que concurrir a un gimnasio o pista de atletismo. Si nunca has practicado deporte y estás acostumbrado a permanecer en tu hogar y lees las noticias, es muy probable que tengas este miedo.
A su vez, los corredores suelen llevar consigo su Smartphone y otros elementos tecnológicos de alto valor. Por ello, si vives en una ciudad o región con alto índice de inseguridad es un hecho que intentarás cuidarte y evitar hacer algo que crees prescindible.
Padecer una lesión por los movimientos que correr requiere
Si de leer u oír experiencias se trata, las lesiones tanto leves como graves (distenciones, desgarros, roturas de ligamentos, etc.) impactan notablemente. ¿Consecuencia? La persona siente aún más miedo de correr y, por lo tanto, cuenta con razones fehacientes para no comenzar a hacerlo.
A su vez, las experiencias de deportistas exhiben que el factor psicológico afecta y hasta aumenta las probabilidades de que los miedos se concreten. ¿Lesionarse más fácilmente porque tengo miedo de que ocurra? Parece ilógico, pero efectivamente hay algo de eso…
Perder tiempo en algo que incumplirá las expectativas
Está claro que para percibir los beneficios de correr debes cumplir con algunos requisitos; por ejemplo, realizar trayectos de por lo menos cinco kilómetros, aumentar la intensidad en determinados momentos, estirar los músculos, etc.
En otras palabras, tú sabes que el running implica mucho más que trasladarte rápido, y eso es a lo que tanto temes: a incumplir con los requisitos básicos y que la consecuencia en el mediano plazo sea no percibir ningún beneficio y, como si fuese poco, haber perdido varias horas.
Incapacidad de poder cumplir con lo básico
Este miedo es similar al anterior, aunque un tanto peor. ¿Por qué? Porque aquí el problema no radica en superar cierta exigencia, sino en sentirte incapaz de cumplir con lo más básico y, por ende, sentir que todo fue un fracaso.
Cabe destacar que no es necesario ser depresivo o tener la autoestima muy baja para pensarlo… A veces recordar alguna situación (por ejemplo, cuando quedaste muy exhausto por correr una cuadra) resulta más que suficiente para sentir este miedo.
La muerte
Lo dejamos para el final dado que es el más complejo y grave. Lo padeces a partir de imaginar dos situaciones:
- Estar corriendo y sufrir un hecho vinculado con la inseguridad (por ejemplo, un disparo repentino a la zona de la cabeza para robarte)
- Pensar que, como no estás acostumbrado al running, te puede dar un ataque al corazón o algo similar que acabe contigo
Estas son las cinco razones que explican por qué correr da miedo. Te recomendamos combatirlas y hasta solicitar ayuda psicológica si sientes que son muy fuertes.