Siempre es recomendable que, independientemente de nuestro objetivo, se incluyan series largas en nuestros entrenamientos. Estas nos van a ayudar a mejorar en velocidad, proporcionando una mayor resistencia a una velocidad elevada.
Pero si algo no hay que olvidar nunca, es que si nos enfrentamos a la distancia del maratón DEBEMOS incluir series largas. Hemos de entender que para ser capaces de correr 42,197 metros con garantías y a buen ritmo tendremos que incluir un buen número de series de estas características en nuestra rutina.
Series largas, el trabajo aeróbico
Nos referiremos a series largas a aquellas que superan los 1500 metros, a aquellas que si se hacen de manera correcta trabajaremos el umbral aeróbico permitiéndonos adaptarnos a la velocidad que llevaremos a la hora de enfrentarnos al maratón. Es decir trabajamos en la zona donde dispones de oxígeno suficiente para el ejercicio.
Hay que tener en cuenta que existen diferentes tipos de series y no con todas se trabaja la capacidad aeróbica del organismo.
Pues bien, las series largas aparte de mejorar nuestra capacidad aeróbica nos van a proporcionar fortaleza mental para afrontar los momentos más duros de un maratón. Se necesita mucha voluntad para terminar un entreno de 5×3000.
En este tipo de series es recomendable que el ritmo sea muy parecido al que emplearemos en la competición, de otra manera estaremos trabajando de manera anaerobica.
Recuperación, muy importante
Buscando por Internet se encuentran diferentes respuestas a cuanto recuperar entre series. Algunos dirán que hay que tomar descansos cortos, otros que alargan los descansos de una manera exagerada.
Para la recuperación nos basaremos en varios factores.
- La distancia de la serie (no es lo mismo 2000, 3000, 6000…)
- El número de series que hagamos (si hacemos 2 descansaremos menos que si hacemos 8, por ejemplo)
- El ritmo (ligado al anterior, a más número de series el ritmo sera ligeramente inferior)
- Las características personales (nuestras pulsaciones máximas, mínimas, la edad…)
Lo idea es recuperar hasta que las pulsaciones se normalicen, si tardan mucho en bajar se puede deber a llevar un ritmo demasiado rápido.