El running es una actividad física que ha conquistado los corazones de millones de personas en todo el mundo. Y no es algo nuevo, ya que no es casualidad que el atletismo sea uno de los deportes populares más antiguos. Así, han surgido y se observan diferentes razones para correr, entre ellas el placer, la competencia y el dinero con sus respectivas variantes.
Aunque puede parecer un ejercicio simple, las motivaciones detrás de esta actividad varían ampliamente según la persona y sus necesidades específicas. Algunas lo hacen por el puro placer de sentir el viento en su rostro, otros buscan superar contrincantes y autodesafiarse y un determinado porcentaje, para obtener ganancia económica. ¡Sigue leyendo para conocer las características de cada tipo de corredor y más detalles!
Correr por placer
Correr por placer es una de las formas más puras de disfrutar de esta actividad física. También la que más puedes observar, dado que tiene lugar en los parques y alrededores de zonas urbanas. Quienes lo hacen, lo pueden explicar por el simple hecho de percibir una serie de beneficios. Desde liberar endorfinas, neurotransmisores que generan sensaciones de bienestar y felicidad, hasta desconectarse de la rutina y bajar de peso.
Asimismo, la libertad de correr al aire libre o en la cinta brinda la oportunidad de conectar con la naturaleza o escuchar música, podcasts o audiolibros, lo que deviene en una experiencia muy positiva más allá del propio deporte.
Además, cuando el placer es el que conduce a una acción (en este caso, el running) se caracteriza por la falta de presión o expectativas. Esto posibilita tanto establecer su propio ritmo y distancia como ir aumentando o reduciéndolo según lo que crees conveniente.
Por competencia
La competencia es otra faceta interesante del mundo del running, como así también en otro tipo de actividades. Para muchos, la búsqueda de mejorar sus tiempos y desafiar sus límites personales es una motivación poderosa. En este sentido, las carreras de 5K, 10K, medias maratones y maratones ofrecen un terreno fértil para quienes buscan poner a prueba su resistencia y determinación.
Así, los runners competitivos tienden a ser disciplinados y enfocados en sus entrenamientos; siguen planes de entrenamiento meticulosamente diseñados y buscan siempre la perfección en cada paso. Además, la comunidad les brinda una oportunidad de conectarse con personas de ideas afines, compartir experiencias y auto-incentivarse aún más. Se hace mediante grupos en redes sociales o encuentros presenciales.
Por dinero
Aunque no es tan común como las motivaciones anteriores, algunas personas logran ganar dinero a través del running. ¿Quiénes exactamente? Por ejemplo, los atletas de élite, patrocinados por marcas deportivas y organizaciones. Estos pueden recibir compensaciones sustanciales por su desempeño en competiciones importantes.
De todos modos, es necesario aclarar (aunque parezca evidente) que no se trata de ser habilidoso en el running. Estos atletas dedican su vida a entrenar y competir a nivel internacional, lo que a menudo incluye participar en maratones, carreras de montaña y otros eventos de alto nivel y convocatoria.
Asimismo, hay deportistas aficionados que ganan dinero a través de carreras patrocinadas y contratos con marcas deportivas. Estos acuerdos pueden incluir el uso de ropa y zapatos de una marca específica, así como la promoción de productos en las redes sociales y plataformas.
En síntesis, el hecho de que existan distintas razones para correr pone en evidencia que es una actividad versátil y que se disfruta de diversos modos. Desde la sensación de libertad y desconexión de la rutina hasta ganar dinero y sentirse satisfecho consigo mismo. Recuerda que si eres principiante o novato, nunca es tarde para comenzar ni tampoco para tomar una decisión correcta.