Parece mentira que los corredores se sientan inseguros antes de una competición después de largos meses de entrenamiento duro. Esa inseguridad provoca que aparezcan los rituales más comunes en corredores, esos rituales abrazan a todos los que se presentan detrás de la línea de salida.
Estos no responden a nínguna lógica científica, sino que un instinto primario hace que los repitas carrera tras carreras buscando, tal vez, que consigas tu mejor marca. Claro que, en el fondo, sabes que esto no influye para nada, pero aún así lo continuas haciendo y no te voy a engañar, yo también tengo muchos rituales.
Estos son los rituales más comunes en corredores
Los rituales más comunes en corredores hacen su aparición cuando de manera inconsciente interiorizas que una acción previa a la carrera ha provocado un buen resultado en esta. No tiene porque ser correlativa, pero tu piensas que ha influido en el tiempo final de la carrera. Y si tu lo piensas así, ¿por qué vas a dejar de hacerlo?
Hay muchos rituales que necesitan los corredores, yo mismo soy uno de esos necesitados y siempre que compito hago exactamente lo mismo. Estos son, a mi parecer, los rituales más comunes en corredores.
1. Atarse las zapatillas compulsivamente
Si, yo soy de esos que necesitan hacer un lazo triple en la zapatilla para asegurarse que no se desatará, saldrá despedida hacía el horizonte y me hará perder valiosos segundos. De hecho me las aprieto antes de salir de casa, mientras caliento y momentos antes del disparo de salida.
Aunque la situación suene cómica es muy angustioso sentir como los cordones se desatan en mitad de la competición y pierdes algunos segundo en volverlos a atar. Para mi es fundamental dejarlas bien apretadas antes de salir, si es necesario con múltiples lazos.
2. No beber nada de líquido 1 hora antes
Como buen corredor sabes que los líquidos tardan más o menos 1 hora en ser procesados y que te entren ganas de ir al baño, por ello prefieres no probar ni gota 1 hora antes. Es uno de los rituales más comunes en corredores, y consiste en calcular detenidamente cuando beber líquido para que las ganas de orinar no te aparezcan en mitad de la carrera.
Beber algo de líquido, sin pasarse, antes de competir es saludable y necesario. Además evitarás sufrir deshidratación mientras compites.
3. Preparar el equipo la noche anterior
Con la misma ilusión que preparabas la mochila la noche anterior de una excursión escolar lo haces con la ropa con la que competirás. Parece una obligación hacerlo, no vaya a ser que levantarte 3 horas antes no sea suficiente para prepárate el equipo de batalla.
4. Utilizar la camiseta de la suerte
Seguro que tienes una camiseta especial que solo la utilizas en ocasiones especiales. De los rituales más comunes en corredores este debe ser el número 1.
En mi caso, tengo una camiseta de NoCorrasVuela contra el Cáncer que me acompaña en todas mis competiciones y exclusivamente la uso en estas. Es tan especial tanto por la seguridad que me aporta como por lo que significa para mi llevarla.
5. Programar alarmas infinitas
Eres muy inocente si piensas que necesitas poner muchas alarmas el día de la competición, de hecho no necesitarás ninguna. Los mismos nervios y las ganas de competir serán tu mejor despertador.
Yo también soy consciente de esto, pero igualmente me aseguro poniendo 1 alarma cada 5 minutos por si no escucho la primera, ni la segunda, ni la tercera…Se que suena muy ridículo, pero necesito tener varias alarmas puestas para poder descansar con tranquilidad.
[Tweet «Los rituales son una herramienta más en muchos corredores…»]
A pesar de poner tantas alarmas, normalmente no suenan ya que me despierto el día de la competición una hora antes de lo planeado con gran exaltación.
6. Revisar y volver a revisar que todo está correcto
Levantarte con tanta antelación es una ventaja y te permite comprobar de manera repetida de que todo lo necesario para correr está preparado (aunque lo hayas preparado la noche anterior).
Seguro que nunca te olvidas de que:
- El reloj GPS tenga la suficiente batería y el autolap esté desactivado.
- El dorsal esté firmemente sujeto.
- La vaselina debe recubrir las zonas sensibles como los pezones.
- El chip es fundamental, y tiene que estar atado a tus zapatillas.
Pierdes tanto tiempo en esto porque no te conformas con revisarlo 1 sola vez, sino que la inseguridad te lleva a revisarlo 4, 5 o 6 veces.